La de “Valserena” es una historia que sabe a buena leche, a heno perfumado, a tierra trabajada con pasión y constancia, a manos de ganaderos capaces y atentos. En resumen, una historia de vacas felices y de queso buenísimo.
La de “Valserena” es una historia que comienza en el lejano 1879, cuando las antiguas familias genovesas de los Serra y los Balduino hacen su aparición en Parma comprando la finca de Gainago. Palazzo, Fornace, Codignolo, Cortiletti, Cacciarina, Malcantone, Risaia, Mazzabue, Comune, cada uno con terrenos y rústicos al servicio, son los nombres de los 9 cuerpos que componen la gran finca.
El proyecto de entonces, como ahora, era el de producir Parmigiano Reggiano “Solo de bruna”, cuidado de cada fase de la cría, atención en la producción y conservación de los forrajes, elección de cada técnica destinada a mejorar el bienestar de los animales y la calidad de los productos contribuyen
a la realización de nuestro queso. Seriedad, pasión y competencia hacen el resto, permitiendo un resultado de absoluta excelencia.
Nuestra leche de Sola Bruna Italiana, rica en calcio y fósforo, permite obtener un Parmigiano Reggiano de sabor pleno pero delicado, del típico color pajizo característico de una alimentación tradicional hecha con henos de diferente calidad y alimento de forma disociada, y con una consistencia que a los 24 meses libera, disolviéndose en la boca, una sensación de increíble completitud. Desde 2016 estamos certificados “no O.G.M.”, una garantía adicional sobre cómo alimentamos a nuestros animales, utilizando productos cultivados por nosotros o comprados a empresas que han elegido utilizar, certificándose, productos no modificados genéticamente.